SEGUNDO LIBRO DE LA TRIGOLOGIA "SEMIDIOSA" PRIMER LIBRO: "SEMIDIOSA HIJA DE LA LUNA" Después de morir, Isabella es recibida en el Olimpo como una criminal. Sera juzgada por una profecía de la cual ella jamás se imagino ser participe, las acusaciones son seberas, las personas en quien creía ahora le dan la espalda. ¿Por que responsabilizarse de algo que ella nunca quiso? ¿Cuál es el verdadero propósito? -Comienzo a entender tus palabras... Selene. Ver tanto odio a lo que es le hacen hacerse más preguntas. ¿Quién es en realidad? ¿Por que todos mienten? ¿Es su verdadero pasado el que conoce? Y llegan las respuestas de una manera que no imagino. -No querida, aquí ya no eres Isabella, mucho menos Moon. El destino se escribió de maneras retorcidas de las cuales Isabella jamás se entero. La realidad es otra, ella no es quien le dijeron que era. Nadie es quien dice ser. #Se creativo, se único, se original. OrfhyLuna~
Ler maisCuando te enteras que los sueños de monstros feroces y las brujas de las historias infantiles no son reales, te sientes el mayor idiota por haber creído alguna vez en ellos. Bueno, eso fue lo que ocurrió conmigo cuando supe la verdad de las personas que dijeron cuidarme desde el inicio y al final resultó ser una farsa. Aun me siento idiota. Es algo que jamás se va. Te queda en la memoria, incluso el sentimiento se queda.
Desde mi posición. He abandonado a las personas que más me necesitaban.
¿Alguna vez te rendiste sin saberlo? ¿Quizás en la escuela con las tareas? ¿El trabajo? Y si no es así, mis más sinceras felicitaciones por no darte cuenta. Cuando lo haces, creo que todo en tu mente acaba por engañarte y decirte que solo es una ilusión, nada serio. Pero te afecta inconscientemente.
Me rendí sin saberlo, lo dije y lo exprese sin sentirlo al 100%. Ahora mi alma paga ese precio. Mis amigos pagan por mí en el mundo terrenal. Quizás jamás los vuelva a ver desde donde estoy, los recuerdos a veces vuelven vacíos, sin sentimientos, algo vacío que ni siquiera sabes que estuvo ahí. Lo que me queda es apelar contra mi encierro el mi nuevo mundo. Hacerme ver como alguien inocente de una profecía de la cual jamás fui consiente.
Me disculpo de antemano si vienes a ver a la chica más valiente del mundo que peleara contra sus parientes dioses.
Aquí, ni siquiera veras una pelea limpia y justa. Ni siquiera los héroes son puros de corazón, o los ángeles. Algunos son demonios y ángeles caídos. La religión tampoco es justa.
Nadie, se salva de la corrupción.
—¿Cómo fuiste capaz? ¡A tu propia hija!
—Jamás quise…
—¡Tú nunca quieres nada! ¡Todo lo haces sin querer! Me has traicionado ¿Y todo por unas cuantas palabras vacías?
—¡No tuve elección! Yo, nunca fue mi intención que acabaras así, yo, ellos… yo te amo hija…
Había escuchado esas mismas palabras antes, pero ahora no les encuentro el significado. La mujer frente a mí ahora es una completa desconocida. Alguien corrupta que no merece mi perdón o tan siquiera que le dirija las palabras. La he amado como a nadie, verla y poder abrazarla era lo único que quería, pero veo que su sufrimiento no es como lo imagine.
Si las personas de verdad me amaran, ellas jamás pensarían en dejarme, no les pasaría por la cabeza el darme la espalda por una sola vez. Y cuando ven venir la enorme avalancha de problemas, son los primeros en cubrirte para salvarte.
Pero las personas que he conocido hoy, no son más que escorias que saltan a la avalancha dejándote desprotegida. A tu suerte. Si sirves como escudo entonces se quedaran a tu lado intentando que le seas de utilidad. Una actitud deshonrosa.
—¿Te gusta mi nuevo juguete?
—¿Cómo lo…?
—Cuando eres un dios completo, puedes cumplir hasta el más raro de tus caprichos. Como este hombre hermoso.
Cuando alguien te odia en verdad, te ataca por donde sea. No le importará llevarse a personas inocentes contigo con tal de verte sufrir y perecer en la miseria.
Y te provocan. Te llevan al borde del abismo, donde tienes dos opciones: atacarle y sobrevivir o ser sumisa y dejarte caer. Si fueras alguien idiota que se deja hacer y deshacer al antojo de quien sea, no serás más que b****a inservible. Pasaran sobre ti dejando su lodo en todo tu ser hasta hacerte ver como nada. Es ahí, antes de caer del borde, donde todo puede cambiar.
Para bien o para mal.
—Imposible —Mis labios hicieron una mueca de enojo, tome por el cuello a ese ser y lo golpee contra el suelo—... ¡Di la verdad! ¡Habla!—Es la verdad —Su voz sonada ronca por el golpe y mi apretón—. Todos fueron mandatos de la diosa Selene. Su mensajero lo aseguro.—¿Mensajero? ¿¡Quien es ese!? ¡Contesta!—Es... Su cuerpo se descomponia con mayor ímpetu.—No, no —Ni siquiera pudo pronunciar una letra del maldito nombre, se hizo polvo en el momento que lo solté—... ¡NO! ¡MALDITA SEAS!Esto no podía ser cierto, mi madre sería incapaz de organizar tal revolución. No tenia como contactar el mundo exterior, para ella tener noticias desde el exterior es imposible. Las únicas veces que recibió visita fue por mi y al momento de ser encerrada. El sello de la puerta solo Zeus y yo podemos romperlo.No entiendo de donde sacan esto. Mi madre sería incapaz.—Lo sabia.La voz tras mi espalda me asustó, mi cuerpo giro en reacción. —Afrodita...En el momento en que note su presencia, ella salió corri
Esto fue mas de lo que pude soportar. Mis piernas habían perdido fuerza, seguían dobladas en el suelo, mis puños contra el mismo, sin saber que mas hacer con la impotencia y, su mirada... esa mirada se repite en mi memoria, parece que la sigo viendo. No quería, sus ojos me siguen atormentando la mente.—Isabella Miller, hija de Stive y Elizabeth Miller —La voz de Zeus, era lo menos que deseaba escuchar—. Por los cargos de Traición, Insulto a los dioses, declarar una guerra y huir de la justicia por siglos —No hacia falta mas pruebas, estaba todo claro, mi madre, mi loba, todos fueron cómplices de mi mundo, fui un títere, es seguro que yo también seré castigada por todo esto—. Se te declara inocente de cargos. Has demostrado ser hija digna de un dios. Se te da el titulo de Diosa e Hija de la Tierra. Se levanta la sesión.¿Que? ¿Yo he sido... inocente? Me coloque de pie aun en trance, la mirada al suelo, escuche claramente sonidos de sillas, un trueno, voces y murmullos de enojo. Claro,
Caminaba de un extremo al otro de la habitación. No recuerdo hace cuanto llegue, solo que lo único que he hecho ha sido quejarme de mis problemas como si la mujer frente a mi fuera mi psicóloga personal.—Todo se pone cada vez mas difícil, primero Hera, luego Ares, casi se mete Afrodita pero resulta ser Eros. ¿Tienes idea del dolor de cabeza por el que estoy pasando? ¿Hestia me estas escuchando?La mujer bebía su copa de vino con total tranquilidad mientras me ignoraba o se hacia la sorda. Desde que entre queja y queja no me ha mirado ni un segundo. Tengo este problema pisándome los talones y ella parece no darle mayor relevancia. Me deje caer en el sofá frente al suyo, aunque solo le veía el perfecto perfil.—Calla —Alzo su mano en mi dirección, seguía sin notar algo mas que ambigüedad en sus acciones—. Tus quejas solo empeoran todo. Admito que me sorprendió la manera en la que lidiaste con Hera, como ignoraste a Ares y no te dejaste de Afrodita —Jadeo frustrada—. Pero vienes a mi con
Abro mis ojos y lo primero que veo es ese techo tan alto, los vuelvo a cerrar. Quiero estar en otro lugar menos en esta m*****a habitación. Cuento los días y las semanas, cada día se siente eterno. Llevo casi tres meses, mismos en los que mi rutina diaria empieza con...—Ama, su café y desayuno está servido.—Gracias —Me siento en la cama, veo la mesa cerca del balcón, Ocírroe abrió las puertas para que entrará la brisa de la mañana—. Déjame sola.—Cómo ordene.El valor para pararme de esta cama fue lo más duro que tuve en mente. Inicia a ser un esfuerzo el solo ponerme de pie. Hay más en este mundo que me obliga hacer ese enorme sacrificio.Me siento en esa silla frente a la mesa. Incluso comer es difícil para mí. Veo el exterior y sólo pienso en caer por ese balcón preguntándome si ahora que soy inmortal podré sobrevivir a esa caída. Pero dejo eso de lado e inicio a comer. Bocado por bocado. Esperando... tal vez una respuesta a todo este embrollo mío.Todo lo que he tenido que perder
-Se continúa el juicio contra Moon mitad diosa mitad Lýkos, hija de Selene la Diosa de la Luna e hija de Phatic Ioannidou.La situación era misma que otras veces. Con la diferencia que la Diosa Hera no se encontraba, tampoco el dios Apolo. Zeus se encontraba más tenso de lo normal, el silencio en la sala se sentía asfixiante. Incluso Hestia a mi lado respiraba con dificultad. Por lo visto nadie quería estar aquí el día de hoy.-¿Hablamos? Susurre a Hestia. Su mano se deslizó y me pellizco la pierna.-Ni un solo ruido Moon. Mantén la boca cerrada, no es el momento.-Nunca es el momento.Tengo entendido que apenas ayer por la noche hubo un disturbio en el ala de Zeus creo saber quien pudo ser, pero no me gusta andar de lengua larga.-Testigos del incidente contra Moon Ioannidou -Dijo la mano derecha de este caso-. Informaron haber escuchado a la semidiosa y la Diosa Selene conspirando contra el Olimpo.-Que pasen los testigos. Ordenó Zeus.-Entra a la sala sus celestias Pandia, Ersa y
La noche había caído con una tormenta, las ventanas de la cámara se encontraban cerradas. La chimenea que debía darle calor a la diosa estaba siendo encendida por una ninfa. Por la puerta entró alguien, cuya presencia era permitida entrar. El único que podía hacerlo sin sufrir la ira de la diosa.El invitado sonrió de lado y habló a espaldas de la diosa.-Para ser una diosa con el poder de controlar el fuego, me sorprende que tengas que poner a alguien más para encenderlo.Hestia respondió. -¿Para que están los sirvientes entonces?Por el rabillo del ojo noto como el mensajero tomaba asiento a su lado, se le veía contento y bastante abrigado, el frio viento debió calar hasta sus huesos.-Tu mentalidad es distinta a lo que dicen de ti.-Lo mismo diré de ti.Solto una risa. -Mantén las apariencias.-Es lo que siempre he hecho -Ésta vez giró su cabeza, viéndole tranquilamente-. ¿A que debo el honor de tu visita querido?-Los dioses están preocupados Tia. Has llevado el juicio demasiado bi
Último capítulo