Capítulo 126 – La decisión de Aylin.

Narrador omnisciente:

El silencio que siguió al caos era casi insoportable. Aylin lo sentía colarse por las paredes del pasillo, pesado y helado, como si la casa misma estuviera conteniendo el aliento después de la tormenta. Aún podía oler el rastro del miedo en el aire, mezclado con el sudor y la sangre seca que manchaba el suelo. Habían pasado apenas unas horas desde el intento de secuestro de Ian, pero para ella parecía que habían transcurrido días enteros.

Desde la ventana del despacho, Aylin observaba el patio interior, donde un par de guerreros aún patrullaban, nerviosos. La luna, casi llena, iluminaba los tejados del complejo con una claridad cruel. Cada sombra parecía moverse. Cada crujido hacía que su pecho se tensara.

Clara dormía en su habitación, o al menos eso quería creer. Después de lo que había hecho —esas sombras suyas desbordándose de rabia y poder—, la niña había caído en un estado de agotamiento total. Aylin apenas había co