41. La Gala
Después de lo sucedido con Dariel la seguridad en la mansión se duplicó, todos los rincones de la casa estaban asegurados, incluso el camino de entrada a la finca. Héctor se preparaba para partir a Italia y no quería dejar a su hermana desprotegida.
— Cedric si es necesario encadena su cuerpo a algún lugar, pero que no salga de aquí...
— Tranquilo, estaremos atentos a cualquier cosa... — miró de reojo a la pequeña que estaba bajando las escaleras con algo de torpeza, tal vez por los nervios — ¿ Estarán bien?...
— Solo es una gala...— respondió indiferente — Y si trata de hacer algo o comete un error no dudaré en meterle un tiro, me estoy cansando...
Regina quedó a unos pasos de ellos viendo al piso con algo de duda.
— ¿ Qué esperas?...— se volvió para entrar al auto.
— Nada ...— susurró.
El auto salió de ahí bajo la mirada de todos los trabajadores, incluidos Brayan e Ivi, la última, viéndolo con ira, ella quería asistir a esa gala, tomar a Héctor de la mano y presumir de formar parte