Epílogo

Volar, antes soñaba con ser un pájaro y volar, con obtener mi libertad, ser tan libre como nadie nunca lo fué, libre de recuerdos, libre de imágenes, de títulos, libre de él.

Ahora¿ Que hace un pájaro libre que se acostumbró a la jaula? No por amor a su dueño sino porque ya nada le espera fuera de ésta, solo el viento frío y él ya no sabe batir las alas?

¿ Qué hace un pájaro herido? ¿ A dónde irá si existe una jaula aún más grande que limita su intento de vuelo?

No me enamoré de él, no podría. No sufrí de Estocolmo, estoy segura, solo me acostumbré aunque no de la misma forma que las demás, yo no tuve la misma suerte que las demás. Me acostumbré a que me mirase con esa frialdad que iba acompañada por el deseo, me acostumbré a abrazarlo inconscientemente, a verlo dormir, a soñar con asesinarlo, a pensar en si me vería bien... No me acostumbré a sus palizas ni a sus gritos pero me acostumbré.

Hace un año que llegué a este lugar, hace un año dejé de ser una niña inocente, hace un año me
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
capítulo anteriorpróximo capítulo
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App