Cap. 31 Cupido oscuro.
—¿Qué pasó? —dijeron algo confundidos.
Mario y Erika encendieron las linternas de sus celulares para poder ver.
—¿Se encuentran bien? —dijo Mario.
Mario apuntó hacia Ino, pero ella se cubrió los ojos.
—¡Apaga eso! Me lastima los ojos. No lo necesito… puedo ver perfectamente en la oscuridad —dijo Ino cubriendo sus ojos.
—Está bien, lo siento —dijo Mario disculpándose.
Mario giró la luz hacia Erika, que estaba visiblemente asustada.
—¿Qué pasa, Erika? Te ves nerviosa.
—Tengo que esconderme… ¿Hay algún lugar donde pueda hacerlo?
Mario, al verla en ese estado, supo que algo malo estaba por suceder.
—En el sótano hay un cuarto secreto. Ahí podemos escon…
Mario cayó al suelo antes de que termina de hablar.
—Ahahah…
Erika retrocedió, aterrada.
—No quería hacer esto, pero no me dejaste elección, Erika —dijo una voz misteriosa.
Ino corrió hacia Mario, pero Jubi gritó:
—¡Detente! ¡No te acerques a él!
Ino dudó… pero siguió adelante.
—¡Papá! ¿Papá, qué te pasa?
Una voz respondió:
—No te preocupes