REINA DEL ODIO. CAPÍTULO 91. El resto de una vida de venganza
REINA DEL ODIO. CAPÍTULO 91. El resto de una vida de venganza
La cena transcurre llena de risas y bromas mientras le preguntamos a Mildred por su nuevo pretendiente. Sé que en los últimos años ha estado tan pendiente de su enfermedad y de Alma que no ha tenido tiempo para nada más. Sé lo que es vivir así, y cuando nos miramos por un instante, sabemos que ninguna de las dos tiene que seguir sola de nuevo.
—Esquiar… ¡no sé esquiar! —se espanta Mildred y yo le aseguro que le enseñaré mañana a primera hora.
La comida es de un restaurante cercano, pero al final Christian se lleva todo el crédito por haberla pedido, como si fuera un chef de cinco estrellas. La casa huele a comida caliente y a vino, y la sensación de hogar me golpea de una forma que no esperaba.
Después de comer, Alma se despide con un bostezo y se va a su habitación. Cae en la cama como un tronco y Mildred y yo nos quedamos mirándola desde la puerta del pasillo.
—¿Puedes creer que había un tiempo en que se le podía cargar i