Reiko
Desperté asustando y enredado entre las piernas de Deva.
¡Mierda! ¿cuánto habíamos dormido?
Me tallé los ojos, y miré por la ventana, el cielo seguía gris y oscuro por la lluvia.
Tomé mi celular de la mesita, y revisé el reloj.
-Mierda, mierda son las 21 horas- Me levanté de golpe para buscar mi ropa en el cuarto de baño, Deva se removió sobre las sábanas.
-¿Reiko?- dijo con voz suave y adormilada.
La miré de reojo, pero continue vistiéndome.
-¿Qué pasa?- se incorporó levemente y se llevó el antebrazos hacia sus ojos, escapando de la luz.
La ignoré mientras terminaba de abrocharme el pantalón, la volví a mirar y me acerqué a ella suavemente.
-Sigue durmiendo, en un par de horas regreso y continuaremos nuestra co