Por Denis
Soy feliz, pasamos una luna de miel excelente.
Doy gracias a Dios que mi embarazo no está tan avanzado, así me canso menos y tengo más movilidad.
Por otro lado, no veo la hora de lucir mi panza de embarazada.
Me encantó el gesto que tuvo Leonardo de llevarme a un lugar que no conocía, hizo su trabajo y me encanta que se interiorice sobre mis gustos y mi persona.
Es mi príncipe azul.
Me llama la atención lo poco que me llamó por teléfono Angy y que cuando la llamaba, ella estaba ocupada, se nota que mi hermano la tiene entretenida.
Descansé todo el día y ya estoy queriendo ver a mi amiga, para darle, por fin, su adorado vestido, el que vio por internet que solo lo vendían en París y no hacían envíos, la sorpresa es que le compré la colección entera de esa marca.
Como tenemos el mismo talle, me lo probé yo, aunque me quedaba un poco ajustado e incómodo, es que ya tengo 3 kilos demás a causa de mi embarazo y me cambió un poco el cuerpo.
Tengo los pechos más hinchados y volumino