Alvarito estaba en los brazos del vicepresidente y jugaba con su corbata. La estiraba amenazando ahorcarlo, pero ¿Quien podría culparlo? Los colores llamaban su atención.
  -Debería tirar más fuerte- Comentó Lourdes sin quererlo en voz alta e hizo que él elevara una de sus cejas
  -¿Sabes cuántas cosas se pueden hacer con una corbata?- Se acercó a ella que ya se había puesto la blusa
  -Ahorcarte es una- Cruzó sus brazos y él notó como sus pechos se juntaban aún más
  -Atar tus manos para desnudarte y hacerte de todo es un mejor uso- Abrió sus labios indignada
  -Eres un degenerado. Te quiero fuera de mi casa- Se acercó a él y le habló con firmeza esperando que él notara que hablaba en serio
  -Apasionado, creativo... son palabras que mejor me definen. ¿Eres una mujer libre o tienes a alguien?- No pudo contener la pregunta
  -Jamás estaré sola, tengo a Dylan y Alvarito- Fue a la sala y él la siguió observando su trasero
  -¿Tienes un hombre?- Preguntó más que interesado
  -Eso n