Entro a la mansión porque ya no tengo otra opción y me muevo directamente a la botella de wiski con más grado de alcohol para poder lidiar con tanto. Sin embargo, apenas tomo una copa cuando ya me han arrebatado la botella.

— No te estuvimos esperando para verte embriagarte.

— Solo así puedo lidiar con tus reclamos.

— ¿Dónde está tu esposa? — pregunta mi padre y yo lo observo sonriente.

— ¿Ya te agrada o quieres saber dónde está para matarla y que así me case con Candy? — pregunto sonriente.

De inmediato, mis abuelos los observan con frialdad, porque no les agrada la idea de divorciarme o quedar viudo porque mi pareja es una humana.

— No me miren así, es denigrante que mi nuera sea una humana. — dice mi padre.

— La Diosa Luna la escogió, ¿vas a gritar con orgullo que la Diosa Luna que nos ha hecho q