- ¿Y bien? Alessia Amato ya tengo el lugar a donde quieres ir – Dijo Antonio Moretti viéndole fijamente.
- ¿Ya es hora de que me vaya? – Respondió una cansada Alessia.
- Si, ya es hora, todo lo que acordamos se te dará y lo que has pedido de último momento también.
- ¿Mi hijo lo sabe?
- No, te toca lidiar con esa parte a ti…
- Está bien… ¿Él va a estar bien?
- Si, ya he generado su nueva identidad y lugar de residencia, tu hijo recibirá toda la herencia posible de Franco Amato, con ello bastará para que viva toda su vida sin preocupaciones y sin volver a meterse en esa vida que llevaba.
- Gracias… Con eso me puedo ir tranquila…
- Esa ya es tu decisión… Sea cual sea la decisión que tomes, en Países Bajos te podrán auxiliar en lo que necesites.
- Por fin he podido hablar con alguien que entiende mi situación.
- Alessia, tú y yo hicimos un acuerdo, este a favor o en contra de lo que decidas ya no es mi responsabilidad.
- De verdad… ¡Gracias! Al menos la vida me ha puesto a alguien que en