45: Completamente desagradable.
MARATÓN 2/3
Kenneth.
—Mamá… —intenté sonreír.
Ellie estaba frente a mí, mirándome tan molesta. Juro que podía ver el humo salir de sus oídos, así que la abracé temiendo que fuera a explotar. Pero no me dejó tocarla por más de tres segundos, porque rápido me empujó.
—Dime que no es lo que estoy pensando Kenneth —pronunció cada palabra con rabia.
Demonios. ¿Cómo podría explicarle? Había visto a Lauren en una toalla, mojada, intentando detenerme. Era obvio lo que pasaba.
—Mamá por favor… —supliqué, temiendo de su molestia—. Vamos a hablarlo. Necesito que respires y me escuches.
Ellie intentó respirar, lo consiguió, bajando sus humos, solo para tomarme fuerte del brazo y obligarme a bajar por las escaleras como si era un niño pequeño.
—Claro que vamos a hablar de esto, Kenneth. ¿En qué demonios estabas pensando? ¡Te mandé a investigarla no a que la llevaras a tu cama!
—¿Hijo?
La voz de Will la sentí como una salvación. Me solté de mamá y esbocé una sonrisa a mi padre. Él nos miraba a mamá