La noche siguiente
New York
Lance
Todavía en mi departamento, me sentía inquieto. El nudo en el estómago no era miedo, pero sí una mezcla incómoda de ansiedad y anticipación. Esta noche iba a conocer a la familia de Karina… a sus hermanas, a las que hasta ahora solo había escuchado nombrar. Una de ellas ya tenía referencias poco favorables sobre mí; Karina incluso me recordó, casi en broma, el incidente incómodo de nuestra primera vez cara a cara.
Respiré hondo frente al espejo, ajustando el cuello de la camisa. No buscaba impresionar con marcas caras o gestos ostentosos; solo quería que me vieran como lo que era: el hombre que ama a Karina y que no planea irse.
El sonido del celular me sacó de mis pensamientos: un mensaje de ella.
"Amor, esta es la dirección del lugar. Avísame cuando llegues. Te amo."
No pude evitar sonreír. Respondí rápido, queriendo que lo leyera enseguida.
"Hermosa, te aviso apenas llegue. Te amo.
Y ahora desde la acera, la música late tan fuerte que vibra en el su