Meses después, febrero
New York
Karina
He vuelto a la oficina este último mes, solo por las mañanas, y siento que poco a poco todo retoma su ritmo natural. Lance está encantado con mi regreso; cada día me recuerda lo mucho que aprecia que pueda organizarme un poco entre el trabajo y Emma. Nuestra hija crece demasiado rápido: está por cumplir cinco meses el 21 de febrero. Mi cumpleaños fue el 17 de enero, y siguiendo la insistencia de las chicas lo celebramos un día antes con una noche solo de mujeres. Por supuesto, Lance se encargó de Emma con la ayuda de Lupe, demostrando una vez más que es un padre maravilloso: atento, cariñoso y siempre pendiente de nuestra hija, desde que llega a casa hasta la hora de acostarla.
Desde hace semanas busco el regalo perfecto para nuestro aniversario. Quiero que sea algo que realmente signifique algo para él. Recordé que desde que lo conocí siempre mencionaba un libro que le había fascinado en su juventud: Si hubiera un mañana de Sidney Sheldon, una pr