Capítulo 110 – El Silencio de Anahir
El reloj marcaba las 2:14 de la madrugada.
La ciudad dormía, pero ella no.
Anahir estaba sentada en el borde de la cama, con la espalda encorvada y las manos temblorosas.
El apartamento estaba en penumbras.
La única luz encendida era la del baño, filtrándose tenue por la puerta entreabierta, como si supiera que esa noche no se merecía oscuridad total… pero tampoco luz plena.
Había silencio.
Ese silencio que retumba más que cualquier grito.
El silencio de un corazón que no entiende qué hizo mal.
Tenía el rostro húmedo y el pecho apretado.
Y una almohada empapada entre las manos, esa misma que abrazaba cada vez que Nicolás salía temprano a la obra, o se quedaba dormido en la sala con los planos sobre las piernas.
—No me lo dijo… —susurró, con la voz hecha polvo—. No me contó nunca el porqué de su venganza.
Se sintió estúpida.Una idiota enamorada.
Una arquitecta de sueños… construidos sobre mentiras y secretos.
Mayte le h