8:30 PM - Damián.
—¡Andrés! ¡Tanto tiempo, compañero!
—¡Damián! Ya ves, aquí de vuelta en la esclavitud.
—¿Pero qué ha pasado? Me enteré que te dieron toda la semana libre, ¿pero por qué?
—Falleció mi suegra, le dio un ataque al corazón mientras estaba de vacaciones en Roma, y como hubo algunas complicaciones en el envío del cuerpo, pedí que me dieran unos días libres para solucionarlo todo.
—Cuánto lo siento.
—No lo sientas tanto, esa vieja era una mala arpía. Hace unas semanas mi suegro la descubrió con otro, un tipo más joven y con más dinero que él, y la zorra no tuvo mejor idea que irse con su amante a pasar unas semanas en Italia para "pensar".
—Santo cielo, me dejas helado.
—Sí, se podría escribir más de un relato con esa historia, pero bueno... ¿Y tú qué te cuentas?
—Y... ya te podrás imaginar, recién está empezando este calvario.
—Sí, Duragnona me contó varias cosas... Pero tenemos un buen grupo, Dami, vamos a sacar toda esta mierda adelante.
—Esa es la actitud, compañero. En