Cuando ya estaban listos para que les tomaran la orden. Derek sostuvo todo el tiempo la mirada puesta sobre el joven del establecimiento. Liam estaba de pie junto a la mesa, esperando que ellos estuviesen listos para hacer su pedido y así poder seguir con su trabajo.
Realmente, se habían demorado demasiado en pedir algo.
-Buenos días, ¿puedo marcar las ordenes? -preguntó Liam, sin mantener esa amabilidad que parecía caracterizarlo, y mucho más si estaba frente a clientes.
-Por supuesto -respondió Sean, echando un vistazo rápido al menú-. Yo quiero un batido de chocolate y una hamburguesa con papas fritas.
-Yo quiero lo mismo que mi novio -añadió James, entregándole el menú a Liam, el chico se asombró bastante por la revelación, no tenía como saber que ellos fuesen gay, pero sentía un gusto enorme por no ser el único ahora mismo,-. ¿Y tú, Derek?
Derek, distraído por la presencia de Liam, tardó un momento en reaccionar. Finalmente, se dio cuenta y dijo apresuradamente: -Sí, sí, yo q