Kayla se congela al escuchar esa pregunta. Sabía que dentro de su corazón se había tardado tanto en contestar. Creyó que él lo dejaría pasar o por lo menos iba a estar en cuestionarla. Duda un poco si contarle toda la verdad. Todo lo que ha ocurrido con Hades. Sin embargo, le cuesta mucho creer lo que hizo y no encuentra la manera de hacerlo.
—Perdón, cariño, fue por la emoción del momento —miente esperando escucharse normal.
—Es que vi cómo mirabas al señor Lara.
—No, amor, ¿cómo crees?, solo que el momento era para celebrar que habíamos sido rescatados ambos —vuelve a mentir Kayla.
—Bueno, eso es entendible. Por cómo se acercó a nosotros completamente molesto, estoy seguro de que debe de estar sacando saliva por la boca después de haberle robado su momento de brillar —contesta Hugo, entendiendo perfectamente lo que su novia dice.
—Sí, exactamente —acepta Kayla, aunque sabe en su interior que no es así.
—Bueno, perdón por preguntarte, es que creí que ya estabas dudan