Los días siguientes la prensa no se dio abasto con tanto chisme que tenían de la familia Lara. De cómo el mismísimo Hades Lara los denunció a todos por abuso. Durante el juicio, Hades presentó mucha evidencia de todos los daños que le causaron sus padres y su abuelo. Incluso las pruebas del abuso sexual que sufrió a manos del señor Benavides, y no solo él, un sinfín de niños habían sido violados y cómo sus padres estaban al tanto de eso y no hicieron nada. Las pruebas eran más que evidentes; por más que intentaron defenderse, estaba claro todo lo que me había sufrido.
El juez tomó la decisión de sentenciar al sargento Benavides a 80 años de cárcel, al señor Fausto Lara a 20 años de prisión, al igual que a la señora Natalia. Al señor Javier, por haber sido honesto y ayudar con las investigaciones, le redujeron su sentencia a 15 años de prisión. Para Hades, escuchar cada una de esas condenas fue un alivio. Su alma había sanado y su niño interior estaba en paz al darse cuenta de que ha