Me levanto de mi silla para salir de la sala de juntas. Ya he dejado claro mi intención sobre lo que pasa en mi empresa, y tengo la intención de cuidar cada parte de ella. Puedo notar que a nadie le gusta lo que estoy haciendo, pero no es como si puedan salir a contar algo de lo que pasa aquí, lo que ocurre aquí se guarda como secreto comercial. El acuerdo de confidencialidad que tenemos no les permite hacer nada.
Aunque hay casos en los que alguien puede quejarse.
— joven amo, ¿no cree que se está pasando? —Habla alguien, haciendo que los demás retengan su respiración.
—¿Quién te crees que eres para hablarle al joven amo? —Dice Mena, en un tono calmado que refleja una amenaza latente —. Si está tomando este camino es porque es necesario, ¿o es que acaso estás dando a entender que tu eres superior a él de alguna manera? Más te vale tener cuidado. Nadie es superior a mi joven amo.
—Yo… lo lamento. —Se sienta de nuevo, derrotado por el Aura de peligro que expulsa Mena.
—No creo