Exhorta con rabia poniéndome a temblar y es que le tengo
mucho miedo. Paso por su lado después de cerrar la puerta, su perfume masculino
impacta mis sentidos y siento que voy a caerme. Siento sus ojos en mi espalda,
en mi cuerpo, en mis nalgas.
El recuerdo en su oficina hace que me pique la piel y no se
que son todas estas emociones que surgen de momento, pero me impulsan a correr
lejos de él.
Entro con el corazón acelerado a la mansión, corro hacia las
escaleras y subo para meterme a mi habitación o por lo menos en donde amanecí.
Tengo mucho miedo de las cosas que me hace sentir y prefiero
escapar de el ya que por alguna razón siento que me puede comer. Me huelo, su
mirada despectiva y sus frías palabras lo ocasionan y me meto al baño para
quitarme el sudor del dia. Mi cabello por fin lo mojo ya que hay jabones para
el cuidado capilar y lo extraño que son de la misma marca que yo utilizo.
No se quien hizo esto, pero agradezco su gesto y demoro en
el baño haciéndolo como hace mucho ti