24. Refugio.
- Refugio.
Narrado por Dulce.
Estaba exhausta después de haberme pasado toda la noche trabajando, sólo quería llegar a casa y dormir. Pero tan pronto como entré y escuché a mi padre, en el salón, hablando con mi madre sobre los papeles del divorcio olvidé la idea de la siesta, y me dirigí hacia aquel lugar. ¡dios! Echaba tanto de menos estar con él.
- Papá – le llamé, cuando hube llegado hasta él, observando como este se ponía rígido y olvidaba la idea de seguir discutiendo con su mujer sobre el divorcio.
- No aceptaré esa cláusula – decía hacia su mujer, sin tan siquiera mirarme – puedes quedarte con el dinero, pero, no quiero verla.
- ¿no quieres ver a tus hijos? – le espetaba ella, do