LOC@ POR TI. CAPITULO 21. Volver a esperarla
¿Por qué era tan condenadamente difícil volver a ponerse la ropa cuando Morgan Reed se la quitaba?
Stela no podía explicarlo pero así era.
Regresaron a la casa del lago y Morgan solo soltó su mano cuando bajaron del auto para reunirse con Marianne y Gabriel.
Estuvieron ahí solo poco tiempo y luego decidieron regresar a Washington.
Gabo y Marianne se fueron a la cabaña de Mount Rainier mientras Morgan se llevaba a Stela.
—¿Tienes hambre? —le preguntó de pronto y ella asintió, porque era muy obvio que estaba buscando una justificación para que se quedaran juntos—. OK, entonces te llevo a comer. Solo vamos a pasar por mi departamento, nos cambiamos por algo de ropa que no huela a aeropuerto y nos vamos. ¿Vale?
Stela hizo un mudo gesto de afirmación y pasaron al departamento de Reed, pero antes siquiera de que él alcanzara a teclear el código, aquella puerta se abrió y Stela se quedó paralizada por la figura que los esperaba dentro.
—¿Clarice...? —murmuró Morgan, sorprendido.
No había pen