Capítulo 156
Mateo no respondió, solo le ordenó al asistente:—¡Arranca este maldito cacharro!

El carro se puso en marcha de inmediato. Por la fuerza del arranque, me fui hacia atrás y, para no caer, me agarré de su cintura. Desde arriba, escuché su risa burlona:

—Cuando estás borracha, te pones más lanzada de lo normal.

¿Lanzada? ¿De qué habla? ¡No entiendo nada! ¡Y aún no resolvemos lo del proyecto! ¿A dónde me lleva?

Me apoyé en su pecho, tirando de su camisa:

—Mateo, ¿podemos regresar? Firmemos el contrato de inversión. Si tienes otras condiciones, las aceptaré, pero invierte en nuestro proyecto. Este plan tiene futuro, nuestro jefe es muy inteligente. Si inviertes, seguro ganas mucho...

—Je, como digas, cariño.

Levanté la vista y me topé con su mirada burlona. En ese momento, mostró todo su desprecio hacia mí. Me mordí el labio y murmuré:

—Mateo, no me subestimes. ¡Algún día te pasare por encima!

—¿Ah, sí? —se rio—. Bueno, ojalá eso no se quede solo en palabras, ¿vale?

—No estoy hablando por ha
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App