- Di lo que tengas que decir sin rodeos que a diferencia de mi hermana, yo tengo cosas importantes en las cuáles invertir mi valioso tiempo.- La pelinegra cruzó los brazos sobre su pecho con seriedad, clavando en él aquella mirada azul turbulenta y cargada de impaciencia.
Si hubiese sido en el pasado, probablemente André se habría enfurecido ante aquel tono y ya hubiese hecho un berrinche ante la clara falta de interés de la mujer frente a él, pero ahora... Ahora debía admitir que esta nueva Ariane lo hacía dudar de su valentía.
Bastaba verse reflejado en aquella mirada fría y sin emociones para obligarse a pensar dos veces cualquier palabra que estuviera a punto de abandonar su boca.
Esta nueva versión no se andaba con rodeos y tampoco era alguien a quien pudiera embaucar con palabras bonitas.
Ya había dejado claro que en cualquier juego o negociación, las cartas siempre jugarían a su favor y nunca saldría perdiendo.
- Yo... Yo quiero que hablemos sobre el compromiso que nuestros pad