- Eres un tonto. - Le di un puñetazo en el brazo. - Pero un tonto me encanta.
Caminamos un par de cuadras más, miramos algunos escaparates y terminamos nuestros helados.
- Tengo que volver a Simplicity -dije.
- Ya lo sé. ¿Nos volveremos a ver antes de mañana por la mañana?
- Creo que no. Theo quiere hablar de negocios. Ha contratado a un nuevo administrador para la empresa y por fin está de humor para actuar contra Giordano.
- Apuesto a que a su manera... - Se rió.
- Sí, su manera: ética, correcta, sin violencia. - Él también se rió. - Es inútil, él es así.
Y yo quería a Theo Casanova exactamente como era: molesto, exigente, ético y a veces imprevisible, como estaba siendo en el momento en que decidió aceptar mi préstamo y poner en marcha, por fin, una nueva Simplicidad.
- Camino hacia el h