- ¿De qué estás hablando?
- Que... Según lo que me dijo, la endometriosis puede dificultar el embarazo...
- ¡María Lua, no creo que estés pensando en esto ahora!
- Oíste lo que dijo nuestra mamá, ¿no?
- Sí. Pero me preocupa más el estado de salud de nuestro padre.
- ¿No te preocupa que pueda... ...quedarme embarazada? - Mi voz cambió, sin querer.
- No, no me preocupa. - Me miró fijamente. - Si estuvieras embarazada, sería el hombre más feliz del mundo.
- El tío ya te quiere. - Ben no se contuvo.
- ¿No puedes tomarte nada en serio? - Le miré, atónita.
- No es culpa mía si el nerviosismo me vuelve habladora y ansiosa. - Se puso en pie. - Anon me entiende. Y respeta mi forma de ser.
- Nuestro padre está en el hospital. ¡Y es grave! - Dijo Theo.
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