Después de recibir la llamada de Juan, Isidora dejó de inmediato todo lo que estaba haciendo y esperó en su oficina la llegada de Marta.
Sin embargo, pasaba el tiempo y Marta no llegaba. Preocupada, llamó a la recepción para preguntar si alguna mujer desconocida había se había pasado por la empresa.
Fue entonces cuando el guardia de seguridad le informó que Marta había sido llevada a la oficina del gerente general.
Conociendo el historial de Sergio, quien solía aprovecharse de su posición para acosar a otras mujeres, Isidora se apresuró a intervenir.
Al ver la escena frente a ella, casi se desmaya. Llegó tarde.
Con sudor en la frente, Isidora miró a Juan y dijo: —Juan...
Juan la interrumpió: —Isidora, este hombre, siendo el gerente general, amenazó a mi esposa para que se acostara con él. No pude tolerarlo y lo golpeé. Tú decides qué hacer con este canalla.
Al escuchar esto, Sergio se rio con desprecio.
Soy el gerente general de la empresa, he contribuido mucho y mi posición es crucial