47
Sin previo aviso, Mijail me voltea. Sus ojos se encuentran con los míos, sus labios comienzan a poseer cada parte de mi cuerpo, un gemido sale de mi boca cuando su boca atrae uno de mis pezones y al parecer eso lo enciende aún más.
—¡Di que eres mía por favor! —sus palabras suenan suplicantes.
—Soy completamente tuya… Mijail Volkov—y sin más de una estocada entra en mí.
—Te amo Victoria Jones.
Sus embestidas se sienten necesitadas, como si quisiera demostrarme cuando me ama, cuanto me extraña y cuanto me necesita. Mi frente está llena de sudor. Mijail toma mis caderas atrayéndome aún más hacia él. El agua de la tina se está derramando por el movimiento brusco que tenemos. Mijail gime en mi odio y siento que lo necesito más cerca, más profundo y como si me hubiese escuchado se hunde más en mí—Esto es para que tu boca no vuelva a pronunciar otro nombre que no sea el mío—sus caderas se mueven tan rápido que siento que en cualquier instante puedo golpearme fuerte la cabeza.
Minutos des