Las personas que entraron están vestidos de negro totalmente, todos traen algo cubriendo sus caras. Uno de ellos me mira, y luego se va a cerrar la ventana y posteriormente correr las persianas.

Aun así algunos rayos de luz de los relámpagos se pueden ver.

Mi corazón comenzó a latir demasiado rápido cuando el que me tenia en la cama me tomo del brazo y me jaloneo para llevarme a otra habitación.

A esa habitación entraron otros cinco hombres. Con un empujón me tiran al suelo, y con mis manos agarro fuertemente mi ropa.

—Diez, te quedas con ella —Ordena el tipo que trae una mascara de perro— Cinco, cuidas las puerta, todos los demás vamos a abajo

Los otros tipos siguen a ese con mascara de perro. En cuanto salen me pego a una esquina.

—¿Quieres que te de tiempo, diez? —Pregunta al que llamaron Cinco

—Lárgate —Respondió "Diez. Una vez Cinco salió de la habitación, sentí la mirada de Diez en mi— ¿Estas asustada, Natalia?

—Vete a la mierda —Respondo con la poca valentía que me queda