El silencio en la casa es apenas perturbado por el zumbido leve de las cámaras nuevas que Ethan instaló esa mañana.

Los sensores de movimiento, el nuevo sistema de alarma, las cerraduras electrónicas reforzadas: todo parece sacado de una fortaleza, y sin embargo, Ethan no se siente más seguro.

Está sentado frente a su escritorio, revisando por tercera vez los ángulos de grabación. El recuerdo de Clara, temblando en sus brazos tras ver a su doble en el jardín, lo persigue como una sombra.

Clara le pidió que no comentara nada con Damián. No quiere que nadie más lo sepa. No quiere que crean que está perdiendo la razón. Pero Ethan no puede quedarse de brazos cruzados. Hay algo profundamente perturbador en lo que está ocurriendo. Clara no se está imaginando cosas. Y él lo sabe.

Por un momento dudó de ella al inicio, pensó que estaba confundida por el tiempo que estuvo en coma, pero ya era muy evidente que Clara no estaba imaginando nada. Todo era muy real.

En la pantalla, retrocede el me