Capítulo 375
Lorena miró por la ventana y dijo distraídamente: —Sí, tu hermana solo parece amable en apariencia.

Juan guardó silencio un momento y, de repente, cogió la mano de Lorena y le dijo suavemente: —Te pido perdón por ella y tú la perdonas. Te compensaré por ella.

«María es mi hermana, ha estado enferma todos estos años, no debería haber cometido un error tan grave.»

Pensó que solo habían tenido una pequeña discusión entre ellas.

Lorena le miró y se mofó: —Me temo que eso no te lo puedes permitir.

Juan arrugó el entrecejo, se aflojó el cuello de la camisa y se recostó perezosamente en su silla, tocándole la mano: —¿Sí? Entonces dime, ¿cómo te ofendió?

Su voz era grave y despreocupada, como si solo buscara algo de qué hablar con ella.

Lorena se rió y no continuó.

Retiró la mano y rodeó el brazo de él, apoyándose en su hombro y sonriendo coquetamente: —¿Por qué no acudiste a mí?

Juan se sonrojó y la miró, con rabia e impotencia ocultas en sus ojos.

—¿Cómo voy a encontrarte? Me has c
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App