—Ven— gruñó, provocándome escalofríos del miedo, y se colocó en una posición algo extraña e intentó correr hacia mí. Lo hizo unas dos veces y podía notar cómo las paredes se empezaban a agrietar por los jalones con fuerza, así que tomé mi ropa antes de que pueda liberarte y salí como pude, sintiendo que mi cuerpo estaba a punto de colapsar, quería ser rápida, pero no podía. No sé por qué siento que haber estado con él fue mala idea, creo que me siento arrepentida o puede ser por todo lo que me hizo a consecuencia de mi imprudencia. Estoy muy herida y adolorida, no sé si pueda sentarme en una semana, me rompió de todas formas y no paraba.
Mis piernas flaquean a medida que camino fuera del lugar, y sus gruñidos agudos retumban, una sensación de temor y un sabor de amargura me embargan. Mi garganta necesita agua, la siento tan reseca que empiezo a sentir un sabor metálico en mi lengua.
Al salir de la habitación, lo hice con cuidado y coloqué el seguro en la puerta. Mientras subía las esc