Derien:
Me está costando una vida contener estás malditas ganas de tomar a mi luna, y hacerle todo lo que me dicta mi instinto, salgo a toda prisa de su oficina y enseguida me encierro en el baño con dolor de bolas, y la verga tan dura que bien podría hundir un clavo en la pared a golpecitos Contener a Prius es otro problema, porque ese lobo cachondo pide a gritos aparearse con su hembra ¡Nuestra! Le replicó al engreído lobo que no ha parado de tirar la baba por ella desde que la vio, arranco con urgencia los botones del maldito pantalón de vestir, tan ceñido a mi entrepierna que me asfixia la polla De un tirón bajo mis bóxer y pantalones, mi verga rebota en mi abdomen y doy un suspiro de alivio al sentir más espacio casi por inercia mi mano se aferra a ese mástil erguido y venoso que se hace notar con mérito propio Un jadeo ronco de pura y burda satisfacción hace eco entre las paredes, continúo estimulando desesperado por liberar tan solo un poco la presión que me tiene doliendo las bolas ! Toc, -toc, -toc! El golpeteo en la puerta me hace abrir los ojos que se encontraban casi en blanco, rememorando el delicioso aroma femenino de mi hembra -Cachorro, cuando termines de pajearte como un jodido adolescente me avisas para llevarte a la hacienda de Mar, - habla mi padre burlón Bufo molesto porque ya había pasado la etapa de adolescente cachondo, y porque por más que me rajo la polla no me satisface No cuando lo único en lo que puedo pensar es en mi hembra, no cuando quisiera es tenerla aquí rebotando sobre mi verga dura mientras lameteo sus tetas como un puto necesitado. No cuando esa deliciosa mujer está ahí afuera, tan mía para no soltarla nunca, yo necesito es sentirla a ella, su tersa piel y su delicioso coño asfixiándome la polla, gimiendo mi nombre Continúo buscando mi liberación, porque simplemente no puedo parar, hasta que finalmente logro derramarme, un potente chorro de semen mancha el piso y mis manos, gruño insatisfecho limpiándome Ahora mi maldito lobo está de mal humor porque esto no es lo que queríamos, gruñe molesto logrando pudrir mi humor de la misma manera Limpio el desmadre que acabo de armar en el baño del despacho de mi padre, cuadro mis hombros y salgo a paso seguro bajo la analítica y burlesca mirada del rey Alexander - ¿Satisfecho?, - tiene una sonrisa socarrona dibujada en el rostro Prius gruñe molesto y balto, el lobo de mi padre le regresa el gruñido, a pesar de ser viejo sigue siendo el rey Alfa y sigue dominando a mi lobo que no se acojona ante su padre -Eres un idiota, - palmea mi hombro juguetón, su tono de voz burlesco nos crispa Nunca provoques a un lobo que sufre de abstinencia, sobre todo cuando de quien se debe abstener es su destinada -Pero eres mi cachorro, Idiota, pero mío, - Gruño mostrándole mis caninos Su sonrisa se ensancha, el más que nadie sabe que Prius está hecho una fiera y está a nada de forzar la conversión, quiere desesperadamente tomar su forma animal y restregarse contra su hembra hasta calmar sus ansias -Parece que has tomado tu decisión, ¿Tomarás a mar como tú luna a pesar de su condición de latente?, - Cuestiona queriendo escuchar de mi boca la confirmación que ya mis acciones le han dado a entender -Es mi Luna, no existe ninguna otra hembra que pueda llenar ese lugar a mi lado, es ella o nadie, - Zanjo bajo la complacida expresión del rey Alexander Cohen - ¿Cuál es el plan?, - cuestiona echando mi mente a andar frenéticamente -Se que ella no me puede percibir como su pareja, pero si puede sentir el vínculo, por alguna razón que desconozco ella tiene cierta hostilidad hacia mi, y si tengo que imponerle mi presencia e invadir su vida para que su instinto la atraiga hacia mí, lo haré, - Zanjo decidido a conquistarla -Pues suerte con eso cachorro, porque Marena Black es un libro cerrado difícil de leer, - me advierte ⛓️⛓️⛓️⛓️ Avanzamos en mi todo terreno en dirección a la famosa hacienda " viñedos de luna " los caminos han sido arreglados y el paisaje es alucinante, el lugar se encuentra a cuarenta minutos de la ciudad y colinda con la frontera norte de Aghora Al llegar mi beta y amigo Líon me espera con mi equipaje, originalmente el tiempo que estuviéramos aquí nos hospedaríamos en mi pent-house de la ciudad, pero los planes han cambiado -Finalmente la encontraste hermano, Nuestra luna, - su sonrisa se ensancha al igual que la mía - ¿Cuándo la presentarás al reino?,-pregunta todo emocionado y hasta me siento mal de romper su burbuja -ahh... Eso podría tardar un poco, -Lion frunce el entrecejo confundido -Ella es una Híbrida, - veo a mi beta emocionarse -Latente, - termino haciéndolo abrir los ojos como lémur -Pero.... No se supone que los híbridos son poderosos ¿Acaso es posible?, - su tono desconcertado hace las mismas preguntas, que hace mi cabeza desde que note su condición -No tengo idea, pero necesito que mandes traer a Sigrid, necesitamos saber cómo despertar a su loba y descubrir qué clase de mezcla está fusionada con mi luna, - Líon asiente - ¿Crees que la curandera tenga esas respuestas?, - cuestiona -Estoy rogando porque las tenga, algo con mi luna no está bien, - mis palabras logran intrigarlo - ¿Qué quieres decir? - ¿El apellido Black te suena?, - se queda pensativo un instante -Marena Black es princesa del reino de Asorta, su padre es el rey Marlo, -Lion explaya los ojos -no tiene sentido que teniendo una línea de sangre tan poderosa simplemente sea latente, mucho menos siendo una Híbrida, - eh captado el interés del beta quien adora los enigmas -Aquí hay algo más Líon, lo presiento, ella fue rechazada dos veces antes de mí, - tengo al beta con la mandíbula casi en el piso -La señorita Marena ha autorizado su paso, habla un chico Omega de unos 10 años, - es uno de los omegas rescatados del reino oscuro Tanto Lion como yo nos quedamos mirándolo fijamente, el chico baja la cabeza sumisamente, claramente intimidado por nosotros Por supuesto que lo está, es un Omega débil aún con secuelas de la esclavitud en presencia de dos machos poderosos -Po... Por aquí, - avanza tembloroso y cuando llega frente a Marena se arroja a sus brazos Ella lo recibe estrechándolo entre sus brazos, mi lobo gruñe inconforme porque nosotros quisiéramos tenerla así -Alfa, - su tono de voz es Hosco a diferencia de la calidez con la que le habla al cachorro entre sus brazos -Les voy a pedir que eviten en lo posible usar su aura de poder en mi territorio, aquí todos son omegas y muchos de ellos aún se encuentran débiles, - habla con la autoridad propia de una princesa poderosa y a pesar de ser tan débil no se acojona con ninguno de los dos, Líon la mira con fascinación, por supuesto que lo hace, Marena es por completo el tipo de mujer que lo enloquece, y es MIA Lo miro mal, y alza los brazos en señal de rendición bajo la atenta mirada de mi luna -El rey Alexander me pidió hospedarlo aquí mientras realiza algunas diligencias en el mundo humano, - como adoro a ese rey entrometido Asiento con mirada inocente, pero mis dobles intenciones no me las quita nadie. Voy a asediar a esa hembra hasta que se rinda entre mis brazos, detallo su cuerpo sin poder evitarlo, lleva shorts cortos de mezclilla y un top deportivo, como se le ocurre a esta mujer pasearse de esta manera en un lugar lleno de machos, gruño entre dientes Por instinto me quitó el saco de mi traje y la cubro con él intentando cubrir lo que es mío, posesivo, por un instante me dedica una mirada cargada de rabia con esos hermosos zafiros que tiene por ojos - ¿Que hace?, - manotea intentando alejarme -Hace frío, es solo, - Líon suelta una carcajada y lo miro mal -No lo necesito, y no se lo pedí, Alfa, - se quita la prenda extendiéndola en mi dirección, aprieto los labios tomando el saco a regañadientes, solo resignando porque en esos escasos segundos en los que lo tubo puesto bastaron para impregnarlo de su aroma < < ¡odiosa!, paciencia Derien, es tu luna, es tu mujer, es tuya, > > me repito como un mantra mientras mi lobo se queja dolido por el rechazo, es obvio que a ella le molesta cualquier cosa que haga -Les mostraré sus habitaciones donde podrán descansar, - nos dirige a la hermosa casa Es enorme y cada detalle en ella ha sido pensado cuidadosa y meticulosamente colocado, con presión por lo que no es difícil adivinar quién diseño cada rincón -Esta es la segunda habitación más grande de la casa, y ahora es suya Alfa, - evita mirarme < < ¿Por qué? Mi lobo y yo analizamos a la pequeña hembra, Prius inclina la cabeza de forma lobuna > > -Derien ,- frunce el entrecejo - ¿Que? -Ese es mi nombre, puedes llamarme así, - le dedico una sonrisa -No lo creo, Alfa ,- zanja dándose la vuelta para continuar avanzando -No nos presentamos, mi nombre es Marena Black, - extiende su pequeña mano en dirección a mi beta -mucho gusto lun... Señorita Black, - lo miro mal advirtiéndole que no puede revelar lo que ella significa para mí hasta que yo se lo diga -Mi nombre es Líon, soy el beta del reino de Aghora,- ella le dedica una sonrisa encantadora y a mí los celos me están volviendo loco -Un gusto beta, por aquí, - avanza a otra habitación -esta será su habitación, - abre la puerta con una gran sonrisa, avanza adentrándose con nosotros siguiéndola -Alguna duda, - voltea a mirarnos -Solo una, - Me mira, apenas - ¿Cuál sería ?,- sus zafiros sin chispa de brillo me miran -Donde duermes tú, - me mira mal y toma un largo suspiro, se nota la molestia y lo mucho que le molesta contestar -Habitación principal, al final del corredor, - señala la última puerta -Los dejo para que se instalen, los veo a la hora de la cena, - se da la vuelta y se aleja dejándonos atrás Una extraña sensación se apodera de mi cuerpo, me hace voltear hacia mi hembra y seguirla con la mirada < < Algo le pasa a mi hembra > > Me advierte Prius, mientras veo como sale con urgencia, baja las escaleras y azota la puerta de la entrada < < ¿Que? ¡Esperas una invitación para seguirla, humano idiota! > > ! ¡Maldito engreído!, - bufo comenzando a moverme < < - si, si, lo que digas, ve y alcanza a mi hembra, que si algo le pasa te rebano la garganta > > ⛓️⛓️⛓️⛓️ Marena: Avanzo a grandes zancadas o el equivalente a la velocidad que me dan mis pequeñas piernas, no entiendo que me pasa, siento mi piel arder y una inexplicable sensación de deseo se instala en mi cuerpo ¡Diosa! ¿Qué diablos es esto? ¿Qué rayos me sucede? Jamás había tenido una sensación igual, me hace querer arrancarme la ropa y me invade la desesperación al no saber qué hacer con todo lo que estoy sintiendo, ni la razón A mí paso me encuentro con algunas omegas que trabajan en los viñedos, me saludan cortésmente, sonrientes así ha sido desde que llegaron a mi hacienda, aceleró el paso con la urgencia quemando mis entrañas Llegó a mi lugar preferido, todos aquí saben que me gusta nadar en la cascada por lo que cuando me ven ir, nadie va para darme total privacidad Me deshago de mi ropa por completo y me lanzó al agua necesitando mucho enfriar mi cuerpo, pero no sucede, siento como si una bola de fuego se haya apoderado de mi intimidad, es una sensación extraña con la que no sé cómo lidiar porque jamás me había sucedido Nado hacia el fondo de la azulada cascada con la frustración apoderándose de mi por completo, emerjo de nuevo en la superficie solo por la falta de aire Alzó mis brazos acomodando mi cabello bicolor detrás de mis hombros, y aún con los ojos cerrados respiro profundamente intentando hacer pasar la sensación que avasalla mis sentidos Hasta que un enorme par de manos se envuelven con soltura por mi cuerpo, trazando un delirante camino desde mis caderas hasta mis senos Jadeo envuelta en la bruma caliente, dejándome llevar por las corrientes placenteras que invaden mi piel de norte a sur Un gran cuerpo se pega al mío y siento como si estuviera soñando, hecho la cabeza hacia atrás y cae en un pecho firme Un ronroneo ronco me hace vibrar el cuerpo, y si no supiera que acabo de salir corriendo hacia la cascada juraría que es un sueño, uno del que no quisiera despertar, porque es la primera vez que me siento deseada, aceptada, desearía dejarme llevar y envolverme en este tonificado cuerpo Las grandes manos van cambiando de rumbo y van de mis montañas a mi monte de Venus. Jadeo cada vez más deseosa, hasta que esos largos dedos tocan un punto demasiado sensible que siempre me causa cosquilleo en mi vientre bajo. Otro ronroneo ronco más cerca de mi oído y un par de besos caen sobre cuello, me hacen abrir los ojos de golpe, para descubrir que sigo en la cascada, y un par de grandes manos realmente están aferradas a mi cuerpo. Me separo de golpe y un gruñido inconforme me hace voltear lentamente hacia el enorme cuerpo a mis espaldas. -Derien,- me sale en un jadeo ahogado mientras intento cubrir mi desnudes con mis brazos Me impulso hacia adentro en el agua, tratando poner distancia, lo miro molesta hasta que descubro sus orbes totalmente negros solo adornados por un anillo dorado, está totalmente poseído por su lobo que ha cedido a sus instintos ¡Estúpida! Me reprendo duramente Eso es lo que soy, como pude creer que alguien podría desearme, siento un gran nudo en mi pecho y me siento tan miserable. Tengo que salir de aquí antes de que su lobo le seda el control y se dé cuenta de lo que está pasando. Alfa Derien y próximo rey alfa de Aghora, jamás aceptaría una latente a su lado, ya lo dijo esta mañana. " Jamás aceptaría tan poca cosa como luna " Doy un trago amargo al recordar esas palabras y por mis mejillas escurren lágrimas saladas que se mezclan con el agua dulce de la cascada. Duele, y duele mucho, solo que aún no logro entender porque, el lobo de Derien observa cada movimiento que hago fijamente, me siento escudriñada y contrariada por todas esas sensaciones tan exquisitas que recién experimente, aún con el cosquilleo haciendo de las suyas en mi piel Me apresuró a salir, me visto con urgencia incluso colocando la ropa al revés ¡Mis bragas! ¿Dónde carajos están mis chingadas bragas?, me rindo y pongo el resto de mi ropa, cuando me coloco el top deportivo, una gran mano toma firmemente mi brazo Me tenso por completo pensando que Derien ha tomado de nuevo el control de su cuerpo, volteo de soslayo encontrando aún los orbes negro y dorado de su lobo -Por favor, no se lo digas a Derien, - suplico con voz rasposa y rota Inclina la cabeza en un movimiento demasiado lobuno. -Alfa Derien odia los Latentes, no quisiera que pensara que lo intento seducir, - mis ojos están inundados de lágrimas y yo estoy llena de preocupación Asiente mirándome fijamente, con una especie de algo que no entiendo, pero no me voy a quedar a averiguarlo. Salgo corriendo dejándolo atrás, antes de perderme totalmente de su vista doy una última mirada en su dirección. Lo veo mecer su cabello oscuro con frustración y otra punzada se instala en mi pecho. Apresuró el paso limpiando de vez en vez las lágrimas que caen sin permiso, hasta que logro llegar a la seguridad de mi habitación donde solo al cerrar la puerta me derrumbó dejándome caer al piso Mi espalda se desliza por la madera y cuando tocó el piso llevo mi cabeza a mis rodillas, para este punto el llanto que soporte sale de mi con grandes y ruidosos sollozos.Capítulo 4 Derien: Trate de seguir a mi luna, tenía mis dudas sobre qué lugar era este, en apariencia era una simple hacienda, pero en realidad era un triángulo entre tres fronteras y eso solo podía ser posible si había magia de por medio. ¡Pero no cualquier magia, una poderosa y antigua! Con ojos inquisitivos observé a la gente de este lugar, nadie aquí era lobo, achique los ojos desconfiados, mientras mi lobo se puso alerta. ¿cómo era eso posible? yo rescate alrededor de cien omegas, se supone que deberían estar aquí > llamo a mi lobo y sé que se encuentra igual de inquieto que yo, la gente nos mira pasar con la misma desconfianza con la que nosotros avanzamos > mi lobo asiente con las orejas levantadas y en total alerta, suelta gruñidos bajos mientras la gente comienza a juntarse por las ¿calles? > mi lobo presta más atención al lugar, a la gente > no puede ser la misma
Marena: -Es... ¿un Pegaso?, - escucho la voz preocupada del beta mientras alfa Derien intenta ocultarnos detrás suyo. -Tranquilos, es mío, - acaricio su espesa cabellera y el animal se restriega contra mi mano. -Lo encontré lastimado en el rio días después de comprar la hacienda, - no entiendo la cara de póker que tienen todos. -Majestad, - escucho que me llaman varias veces. Hace mucho tiempo no me llaman así y creí que se referían a Alfa Derien, hasta que recordé que la hechicera confianzuda lo llama por su nombre, algo dentro de mí se revuelve y me molesta. Tengo cierta punzada en el pecho que intento ignorar, no entiendo porque me molesta. No debería permitirme sentir absolutamente nada por un hombre para el que jamás seré suficiente. Pero no puedo evitarlo, cada vez que lo tengo cerca mis ojos se desvían hacia el sin siquiera pensarlo, desde ese maldito día en el rio no paro de pensar en él, extraño lo que me hizo sentir su toque en mi piel, lo eh evitado como la roña,
Derien: Se con certeza ahora que lo eh visto, que detrás de mi hermosa hembra hay un gran poder, el problema es que ha sido bloqueado y el poder es tanto que de no aprender a manejarlo podría lastimarla incluso a ella siendo la receptora. Esto podría adjudicarse también a la falta de su espíritu de magia blanca y a su loba, ambas son importantes y no están. Miro el rostro sereno de mi luna mientras duerme tranquilamente enredada entre mis sábanas, me parece increíble que hace apenas unas horas nos detuvo el corazón a todos en ese enfrentamiento con el Urutaú. Según me explico Sigrid, cuando su magia se filtra le causa alucinaciones por lo que no es consciente de lo que pasa a su alrededor. Cuando el pajarraco de magia oscura atacó, como si fuera una coreografía bien ensayada todos los hechiceros rodearon a mi mujer en formación circular conmigo a la cabeza. Yo tengo claro que mi instinto de pareja me lleva a protegerla de manera posesiva, todos aquí, incluyéndome dependemos
Marena: Renuevo mi cabeza pesarosa con todo dandome vueltas, batallo para mover mis extremidades siento como si un tren me haya pasado por encima, la sosobra que abasaya mi pecho. Es un sentimiento que no me deja, se ha instalado en mi de manera permanente, un ronroneo me hace tallar mi mejilla contra la almohada suave como pelaje terso que cosquillea mi nariz. Intento moverme pero mi cuerpo se topa con una dura pared de musculos a mi espalda, me cuesta abrir los ojos pero me despierto asustada cuando algo se aprieta alrededor de mi cintura y un quejido ronco me hacen explayar los ojos para encontrarme de frente con la enorme cabeza de un lobo negro media noche. me mira fijamente e intento retroceder pero el agarre en mi cintura se aprieta con posesividad, mientras mi espalda topa con una deliciosa dureza calida, bajo la vista hacia mi cintura y encuentro un par de fuertes brazos con tatuajes tribales rodeando mi cuerpo. -Cinco minutos más,-me habla la voz ronca que conozco b
Derien: "¡Tan tuya como Mía, Pulgoso! " Salgo a grandes zancadas del despacho con el pecho enardecido y a punto de perder el control en contra de mi lobo, y eso sería desastroso. Las palabras del malnacido que pretende meterle mano a mi hembra me retumban en la cabeza. Al salir la veo a ella, con su carita pecosa atestada de preocupación y enseguida la tengo a mi lado con los ojos nublados por las lágrimas. La preocupación que se esmera por reprimir sale a raudales por todo su cuerpo, ella no entiende porque le importa tanto nuestro bienestar, es el vinculo que nos une actuando por ella, inevitablemente por mas que se niegue siempre terminara cediendo ante el instinto porque hay algo tan fuerte como el magneto que nos une. > Prius gruñe exaltado y me tengo que alejar o voy a cometer una locura. -Derien, - Toca mi labio inferior roto, y para lo único que me da mi embotado cerebro es para inclinarme y devorarle esos jug
Marena: Cuando finalmente tuve a Abraxas frente a mi, luego de solo hablar por teléfono con el supe que estaba perdida, cualquier imagen visual que pudiera haber tenido se quedaba a medias en comparación con el hombre que tenía al frente. Sus ojos me recorrieron de pies a cabeza con descaro, casi podría jurar que mi piel hormigueaba por cada lugar que sus ojos miraban. Sus hermosos pozos adornados por largas y rizadas pestañas lograron sonrojarme podría jurar que me veía con Deseo crudo, y por primera vez en mi vida me sentí deseada, sin esa barrera que siempre opacaba cualquier oportunidad que pudiera tener. En ese momento era simplemente Marena Black, la CEO y socia , la mujer , dejando de lado el pretencioso título de princesa que según mi madre no merecía por ser tan insignificante. El simplemente me estaba mirando a mi, por supuesto que sabía que Abraxas Siller era un hombre peligroso, toda mi vida me hablaron de lo perverso que podía ser. -Señorita Black,- su ronca voz
Marena: Quise saltar del escritorio en el instante en el que el rey Alexander entro en mi despacho, pero el agarre en mi cintura se volvió posesivo. Abraxas no me permitió alejarme de su toque ni un milímetro, sentí la pesada energía del rey Alexander al entrar con paso firme y mirada acusatoria. -Marena,- El hablo con la misma voz dura y ruda que me hablaba mi padre cuando se sentía decepcionado de mí, después de que mi madre le recordara cada segundo del día lo inútil que era. Sentía que el corazón se me saldría del pecho en cualquier momento, odiaba sentirme así porque toda mi vida mi madre utilizo la culpa y la decepción como armas psicológicas en mi contra. -El rey oscuro no es bienvenido aquí, - su voz severa me recuerda a mi madre. Llega a mi lado y tira de mi brazo con brusquedad haciéndome trastabillar a sus espaldas, Abraxas aprieta la mandíbula claramente molesto. -No la toques, - apenas alcance a escuchar su voz posesiva porque me atrapó entre sus brazos. -Apenas
Derien: -Esto es malo, - Fue lo que dijo el tenebroso antes de perderse en sus propios pensamientos. -No puede ser, esa bruja malparida, - apretó la mandíbula - ¿Que ocurre?, - Abraxas me miro y luego a la mujer enredada entre mis brazos, la miro con intensidad, fijamente. No tenia que decirlo, se notaba en cada gesto, podía haber un reino entero metido en este despacho, pero su mirada eventualmente siempre recaía en ella, lo sé por qué me pasaba exactamente lo mismo. Marena dormía con una calma envidiable, ajena a cualquier cosa que pudiera perturbar sus sueños, su respiración era suave y de vez en vez se le escapa un pequeño quejido y su entrecejo se fruncía, que se disipaba cuando Prius le ronroneaba al oído. Ella era hermosa incluso cuando dormía y de la comisura de sus labios escapaba un pequeño hilo de baba, ¡Devastadoramente ADORABLE! Sus mejillas sonrojadas y pecosas me incitaban las ganas de llenarle el cuerpo de besos, uno por cada peca que la adorna. Marena Black