Aplicaba mis cremas nocturnas distraídamente, la mirada perdida en el espejo. La frase de Lina seguía girando en mi mente: «Ingrid fue encontrada muerta». La velada se apagó poco después de ese anuncio; pese a que la alegría no desapareció del todo, un aire extraño quedó suspendido en la casa.

Leo salió del baño con el pantalón de dormir, dejándose caer en la cama.

—Averiguaré bien qué pasó. Por las fiestas será complicado, de igual forma hablé con Thomas antes de que se marchara, se encargará del informe —mencionó recostado contra el cabecero.

Cerré el frasco del sérum, acomodándome a su lado en la cama. Limpié la cremita que quedó entre mis uñas antes de romper el silencio, la pregunta salió inevitablemente.

—Leo, ¿crees que realmente ella se quitó la vida?

Él negó con firmeza.

—Prefiero no adelantar teorías, sin embargo, nada de esto encaja.

Lo observé, desconcertada.

—Tú dijiste que Adrik se ocuparía de ella. ¿Acaso no pensaste que la eliminaría?

Leo entrecerró los ojos.

—No consi