«Es incorrecto e inmoral tratar de escapar de las consecuencias de los actos propios». Mahatma Gandhi
Por dos horas estuve en la misma posición. Robert no se apartó de mi lado y me acompañó con su silencio.
—¿Quieres que vayamos a cenar a algún lado? Podemos ir donde tú quieras y conocer un poco más de la ciudad para que te distraigas. No podemos arruinar tus vacaciones de ensueño por tonterías.
¿Tonterías? ¿Cómo se atrevía a decir que mis sentimientos eran simples tonterías? Lo miré sin ninguna expresión y traté de no externar mis pensamientos:
—No tengo hambre, pero si quieres puedes ir a comer y pasear.
—Claro que no, mi amor, sin ti no voy a ir a ningún lado. Esta ciudad sería horrible y aburrida sin tu compañ&ia