Lo que dicta el corazón (2da. Parte)
El mismo día
Filadelfia
Violet
Hay amores que llegan sin avisar, que irrumpen en tu vida para desordenarlo todo, para tocar cada grieta que creías cerrada, para coser los pedazos rotos que ni siquiera sabías que estaban ahí. Hay amores que te recuerdan que aún puedes soñar, que aún puedes sentir sin miedo. Y entonces te lanzas… no como la primera vez, con torpeza y dudas, sino con los ojos bien abiertos, con el alma desnuda y latiendo, con la certeza de que quieres construir un futuro junto a esa persona. Cada miedo se convierte en desafío, cada incertidumbre en fuerza, porque ahora sabes que amar no es solo dejarse llevar, es elegir, una y otra vez, estar allí, entregar tu corazón sin garantías y creer que todo valdrá la pena.
Ethan fue mi primer amor, ese que me hacía soñar despierta como un cuento de hadas, pero también quien me rompió el corazón con su ausencia. Y entonces, cuando menos lo esperaba, apareció Bobby… mi galán, con esa fuerza arrolladora, con esa tenacidad que me der