44. Esto no es un castigo
Sin embargo, el Alfa que había hablado no se retractó. De hecho, parecía más seguro mirando abiertamente a Lana, quien apretó los labios con furia contenida.

—Solo propongo un trato… La marcaré en cuanto lleguemos a mi territorio…

Un escalofrío le recorrió la espalda a la hembra.

Horrorizada pensó en que quizás Eryx escucharía cualquier trato.

Su padre también tenía un harén y las hembras que pertenecían a él poco le importaban. Así que obviamente no sería distinto con Eryx.

Él seguramente escucharía La propuesta del Alfa que hablaba Lana sintió una arcada en su garganta y el asco recorriéndola al ver la manera en que aquel macho la miraba tan fijamente al punto de que ni siquiera se dio cuenta que el aire se puso tenso, como antes de una tormenta.

Eryx lo interrumpió de un salto y en cuestión de segundos, el Alfa fue arrojado bruscamente y estampado contra la pared.

—¡Nadie la toca! —rugió como una bestia —. ¡Ni siquiera la mires!

El silencio se hizo absoluto.

Lana no podía creerlo.

ANGGIE VILLALOBOS

:3

| 14
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP