Capítulo 76.- La furia.
El silencio previo a la tormenta duró apenas un latido. Desde la ventana principal, Blair contó al menos seis figuras avanzando entre sombras, cada una con armas que brillaban bajo la tenue luz. No eran aficionados. No eran improvisados. Esto era un operativo cuidadosamente planeado… y dirigido directamente contra Cyrus.
—Tenemos treinta segundos antes de que intenten entrar por las rutas principales —dijo Cyrus, ya activando otro panel oculto—. No vamos a esperar a que lo hagan.
Blair entendió lo que eso implicaba aún antes de que él desplegara el compartimento oculto en el muro. Armamento táctico, dispositivos inhibidores, un set completo de defensa ofensiva que no se veía en residencias comunes. Cyrus no era un hombre común, y su casa tampoco lo era.
Él le entregó un comunicador.
—No te lo quites. Si te separas de mí, hablas. Si escuchas silencios prolongados, hablas. ¿Entendido?
Blair asintió, aunque su respiración temblaba. No por miedo, sino por la intensidad del momento, por la