52| Canción de libertad.

Tal como Xavier lo había imaginado, su departamento era una mescla entre el orden de Maxwell y el desorden suyo.

Apenas habían pasado una noche en el departamento de soltero que tenía antes de casarse y ya la concina estaba a rebuscar de trastes sucios, el mueble tenía sabanas y restos de palomitas de maíz por todo el lugar.

Cuando se levantó esa mañana del sábado Maxwell estaba tratando de barrer las palomitas de debajo del mueble y Xavier se lo quedó mirando.

— ¿Qué haces? — le preguntó y el niño se limpió el sudor de la frente con la manga de la mano.

— Alguien tiene que ser el adulto responsable aquí — dijo y Xavier soltó una carcajada. Caminó a prepararse café, no era él mismo hasta que tenía una buena taza de café en la mañana, y cuando se miró en el espejo del horno microondas notó los hinchados que tenía los ojos.

— ¿Lloraste toda la noche? — le preguntó el niño entrando a la concina y Xavier se aclaró la garganta.

— Claro que no, me la pasé trabajando, es todo — el niño abri
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App