Leonard

Al día siguiente me estaba preparando para esa dichosa cena a la que, sinceramente, preferiría no asistir. Mucho menos me agrada la idea de que Analisse vaya, pero dadas las circunstancias, no tengo margen para negarme. Dimitri, después de todo, ha invertido en la empresa y es uno de los socios estratégicos en este momento. Veo a mi esposa, ella está en el jardín, conversando tranquilamente con su madre, mientras yo sigo atrapado en mis pensamientos.

No dejo de darle vueltas a toda la información que el investigador me entregó sobre Diana. Estoy esperando su llamada; necesito escucharla que mas mentira tiene que decir. De hecho, estuve considerando visitar a su madre en el hospital. Quizá ella podría aclararme algunas dudas, después de todo, no creo que me mienta. Pero la gran pregunta es: ¿sabía realmente la clase de hija que tenía?

Es curioso cómo la vida te sorprende, cómo crees conocer a las personas, hasta que un día te alejas del enjambre de abejas y ves claramente quién