ANONIMO
En ocasiones, aquellos que han sido históricamente oprimidos y explotados llegan a un punto de quiebre. Se cansan de ser las presas, de ser objeto de abuso y manipulación, de vivir en un mundo que les exige resistencia y lucha, pero no les ofrece las herramientas ni la oportunidad para hacerlo.
La frustración y la desesperanza se acumulan, y la sensación de impotencia se vuelve abrumadora. Se les exige que rompan con las cadenas que los atan, que se liberen de la opresión y la explotación, pero no se les proporciona el apoyo ni los recursos necesarios para hacerlo.
En este mundo, los fuertes dictan las reglas y los débiles deben seguir. Pero hay momentos en que los débiles se levantan y deciden tomar el control de su propio destino. Deciden romper con las cadenas que los atan y luchar por su libertad.
Es en esos momentos cuando el mundo cambia. Cuando los débiles se convierten en fuertes y comienzan a luchar por sus derechos. Es entonces cuando se produce un cambio de paradigm