Mi corazón es tuyo.
El CEO y la asistente llegaron por fin a la reunión, el socio que vieron era muy profesional y también llevaba a su asistente.
Una vez que trataron los asuntos importantes, los CEOS desayunaron, así mismo Emma y el asistente Diego Palomares hicieron lo mismo en la mesa contigua, ellos conversaban acerca de sus puestos.
— ¿Qué ha pasado con él asistente Rogelio? Seguro que el hombre terminó en algún psiquiátrico, su carga de trabajo con él exigente CEO Mendoza era gigantesca.
— Nooo, nada de eso, él se quedó está vez en la oficina, aunque si parecía estar lleno de trabajo.
Diego de pronto sintió pena por haber hecho ese comentario, se rascó un poco la nuca antes de decir.
— Bueno... Aunque se rumora que ese asistente es el mejor pagado de todo el país, escuché que tiene prestaciones privilegiadas, y que en unos años tendrá en sus manos una pequeña fortuna. ?Te imaginas lo que tendrá en su cuenta bancaria para cuando se retire? Ahhh... Que suerte de asistente personal