capitulo 33

Mientras el avión comenzaba a descender, miré por la ventana y vi el paisaje cambiar. La vista de las aguas turquesas y las playas blancas me tomó el aliento. Me sentí emocionada de estar por llegar a nuestro destino, y no sabía qué esperar. Emir me sonrió y me tomó de la mano, como si supiera que estaba nerviosa.

— Estás bien, ¿verdad? — Sí, estoy bien — respondí — Él me apretó la mano.

Después de recoger nuestro equipaje, Emir me llevó a un coche que nos esperaba. Nos dirigimos a nuestro destino, y yo no podía dejar de mirar por la ventana. Todo era tan nuevo y emocionante.

Llegamos al hotel y nos dirigimos a la recepción para recoger las llaves. La trabajadora nos sonrió.

— Bienvenidos, aquí tienen las llaves de sus habitaciones — Me sorprendió que dijera "habitaciones" en plural Me volví hacia Emir.

— ¿Por qué no compartimos habitación?.

— Pensé que te gustaría tener tu propio espacio — respondió — Pero insistí — No, quiero compartir habitación contigo. Quiero estar cerca de ti.
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App