Mundo ficciónIniciar sesiónALFA RHYDAN
Tomé la mano de Mila.
Su piel aún estaba tibia, su respiración tranquila, pero yo sabía que detrás de esa calma había cansancio, dolor… y miedo.Quería llevármela lejos de todo eso. Solo descansar. Que su cuerpo y su mente se curaran después de la guerra, igual que la mía.—Iré a descansar con Mila —dije mirando a Tom y Demian.
—Jajaja, claro, a descansar —se burló Tom con una sonrisa maliciosa—. Pobre Mila, alfa, déjala respirar un poco.Les gruñí, medio en serio, medio divertido.—Cállense, par de idiotas.Les di un golpe suave en el brazo mientras Mila, detrás de mí, bajaba la mirada, sonrojada hasta las orejas.Caminamos entre los soldados que habían venido en nuestro apoyo con Tom y Demian, ellos comenzaban a recoger







