Capítulo 19

Jazmín comenzó a dibujar joyas sin siquiera notarlo al principio. Al margen de sus páginas de bocetos aparecían aretes colgantes como lágrimas, anillos con piedras ocultas entre espirales de oro y brazaletes con formas orgánicas, como si la naturaleza se hubiese fundido con el metal. Los dibujaba de acuerdo con las pláticas que tenía con Doña Rose, le encantaba escucharla sobre las modas de antaño. También, entre esos dibujos, surgían frases sueltas… pensamientos, líneas de historias que llegaban sin avisar.

“Ella caminaba con el corazón roto, pero sus pasos seguían marcando la tierra como si aún le perteneciera.”

Frases así, sin explicación ni destino, llenaban los rincones de sus cuadernos.

Rose, con su aguda mirada, lo notó una mañana mientras Jazmín se distraía viendo por la ventana.

—¿Quién escribió esto? —preguntó con una ceja alzada, sosteniendo el cuaderno.

—Yo… solo fue algo que pensé. No tiene importancia —sus mejillas se pusieron rojas de vergüenza.

—Tien