Camino de un lado a otro por mi oficina, intentando procesar la situación. Amira se detiene frente a mí, su rostro serio y preocupado.
—Tenemos que hacer algo —dice, su voz llena de determinación—. No quiero que mi hermana María sufra al ver a tu hermano con otra.
Me detengo en mi caminata, sintiendo el peso de la responsabilidad sobre mis hombros. Necesitamos la alianza con Myrna para sobrevivir, pero la idea de ver a Kaelos y María infelices es insoportable.
—Lo sé —digo finalmente, sintiendo la desesperación crecer en mi interior—. Pero necesitamos la alianza con Myrna. Sin ella, estamos condenados.
Amira me mira con intensidad, su mirada reflejando la preocupación y la determinación.
—Entonces, ¿qué vas a hacer, Thane? —pregunta, su voz llena de emoción—. ¿Vas a sacrificar la felicidad de tu hermano y de mi hermana por una alianza que no sabemos si nos beneficiará?
Vuelvo a caminar, intentando encontrar una solución que no parece existir. La necesidad de proteger a mi familia y nu