Savannah es una emigrante que ha logrado llegar a su destino después de sufrir muchas cosas en su travesía por las distintas fronteras que cruzo. Vio y escucho las más terribles calamidades, pero lo logro, una nueva vida la espera, con su hermana como apoyo se establece en la enorme capital, allí consigue su primer trabajo y conocerá a Burka. Un empresario exitoso, CEO de su propia empresa, quien conoce en el pequeño café de mama bella, Savannah nunca ha estado enamorada y Burka se aprovechara de su inocencia, sin esperar caer rendido por ella. Pero no todo es sencillo, saber las verdades que rodean a Burka hará casi imposible para ella soportar todos eso sentimientos nuevos por ese ser celestial que no se sabe si llego para salvarla o para apresarla en su mundo de mentira y falsedad.
Leer másBurka Arslan —Liebana… — odio que me toque, pero debido a que acepte el trato parece un maldito chicle, se arrodilla y cierro los ojos, no enciende nada en mi… mi miembro sigue flácido a pesar de sus intentos por despertar mi interés. Me levanto para que no se avergüence y comience una pelea, lleva intentando una maldita semana, Pero no es Savannah, el simple olor me da náuseas. —Asi no voy a salir embarazada nunca Burka, si no pones de tu parte no estamos haciendo nada — se levanta y se coloca una bata para tapar su cuerpo desnudo, es una mujer hermosa, Pero no la mujer para mí. Salgo afuera a ver el mar, ahora mismo estamos de paseo en unos de mis yates, pensó en que sería bueno pasar tiempo juntos en lugares neutros, yo solo veo a Savannah aquí estando solo conmigo, desnuda, mientras me la follo por cada maldito rincón. Entro de nuevo por teléfono, ya está anocheciendo, debí dejar mis deberes en la empresa para cumplirle el capricho, pienso en escribirle a Savannah, tengo días
Savannah Pérez Las clases comienzan, la rutina ya atareada que traía se me multiplica, el en restaurante de Cata me ayudan con el horario, Pero Burka tiene razón, no estoy rindiendo, el trabajo, la universidad y las horas con el me están consumiendo. —Hola guapa! ¿Cómo amaneció ese cuerpo trabajador? — Es Chelsea, una chica de salón de clases, ha Sido súper buena onda conmigo, me acogió desde el primer día, deduciendo que era extranjera y que me veía super perdida y nerviosa. —Hoy mejor, ayer tuve día libre y descanse… — aunque me tocó lavar, limpiar y organizar un poco el departamento, había polvo y me da vergüenza que Burka vea el depa así, además estuvo en la tarde un par de horas, lo que me sirvió de ejercicio extra, aún así se fue temprano y pude descansar toda la noche. —Me alegro, ¿Trajiste la historia de la recetas?, me costó conseguir las originales.Resoplo — Si, eso se llevó parte de mi día libre también, descargue algunos libros con temas al respecto y conseguí algunas
Savannah Pérez —Te mandaré para el pasaje para que vayas a conocer en lo que esté mucho más estable, es un lugar hermoso, totalmente distinto a esto, a América, no se parece en nada, ya verás y... Podrías plantearte vivír allá conmigo, no se… dependiendo de cómo fluya todo — suspiro, se exactamente a lo que se refiere.—Lo pensaré en cuanto tenga el titulo, eso me ayudara a conseguir un puesto mejor para trabajar, solo son tres años, aunque lo de visitarte si te tomo la palabra hermana, claro que me encantaría conocer Rusia, jamás pensé conocer estados unidos, y gracias a ti estoy aquí…. Estamos en el aeropuerto esperando que llame su vuelo, las horas pasaron demasiado rápido, no me parece suficiente.—Me alegro que estés bien y que ese mal nacido no haya logrado su objetivo, estaré tranquila cuando esté tras la rejas. —Ya casi no pienso en eso, gracias a Burka estoy segura. —Ese hombre siente algo más que deseo por ti, Pero está casado…. — me encojo de hombros, antes era algo que
Burka Arslan Me quedo con las ganas de seguir en la faena con Savannah, sin embargo llegó a mi departamento satisfecho por el acto, cada día me gusta más, me fascina como se deja llevar, como se deja hacer, como su cuerpo reacciona ante mi tacto, ante mis caricias y mis besos, como ya no es tan tímida, ser solo quien la ha tocado me pone al límite. Entro a mi habitación y me freno al ver un bulto en mi cama, he encendido la luz, por lo tanto se remueve. —Liébana, ¿Qué carajos haces aquí? — mi voz retumba entre las cuatro paredes, ella se acomoda y me da la cara, me observa con los ojos abiertos de arriba abajo. —Tu, tu madre — se sienta aún observandome — ¿Dónde estabas? —No es tu maldito problema, ¿ haces aquí? — paso la mano por mi rostro exasperado. —Tu madre logro que me dejarán entrar, dijo que aceptarías el trato y que lo intentaríamos por el siguiente año… así que aquí estoy — la sabana cae y su cuerpo desnudo queda a la vista. —Aun no he aceptado ningún puto trato conti
(+18)Savannah Pérez Muerdo el cojín con fuerza para evitar seguir gritando, Burka me tiene amarrada de manos y en mis piernas hay un tubo que evita que la cierras, el me penetra con fuerza, siento su miembro en mi útero, su manos agarran mi cabello y me alza el rostro. —No te silencies, quiero escucharte mientras te follo — me grita y yo le correspondo. Estamos en una habitación privada, después de beber un par de tragos más, tocarme delante de todos sin mostrar mi cuerpo, me trajo prácticamente arrastras. Pude relajarme y corresponderle al ver que solo estábamos nosotros. Mi mascara ha desaparecido, siento mi rostro mojado de sudor, de pronto siento algo frío y gelatinoso en mi entrada trasera, mi cuerpo se pondrá algo rígido, aún no me acostumbro a su invasión en mi vagina, no me quiero imaginar lo que me va doler si me folla por ahí.—Burka — digo con voz suplicante. —Solo te preparo, hoy no pasará, Pero pronto. Siento una punzada cuando me introduce algo y me giro para ver
(+18)Savannah Pérez —Pareces una jodida Diosa egipcia, la hija de Cleopatra o Nefertiti.Me veo en el espejo y mi hermana tiene razón, no parezco yo, sigo pensando en que todo esto es una fantasía, me apuñalaron y desperté en otra dimensión. Mi vestido es totalmente blanco impoluto, con un cinturón dorado, con detalles del mismo color y un azul turquesa, en mis brazos luzco joyas, con símbolos del tema, en mi cabeza una corona con forma de serpiente, y el maquillaje me encanta, mis ojos licen un delineado negro intenso que hace que mis ojos se vean más claros de lo que en realidad son. Mi teléfono repica y veo el nombre de burka, ni corazón salta emocionado.—Ya estoy lista — contesto de inmediato. —Te espero abajo — corta de inmediato y doy varios brincos de emoción. —Ya está aquí, debo bajar — abrazo a mi hermana — deséame suerte, estaré temprano aquí. —Anda pues, no hagas esperar al faraón — se ríe y yo niego. Bajo con una emoción nueva burbujeando dentro de mi, me encantan
Último capítulo