Germán se cubrió la cara con el celular, sintiendo que no solo había quedado como un idiota frente a Celeste, sino que ahora también su imagen se iba a venir abajo frente a su cliente.
¿Y si Marisela pensaba que era un tipo súper asqueroso? ¿No lo iba a denunciar? Y ahí se terminaría su carrera de abogado...
Se le vinieron a la mente un montón de ideas raras, y entonces sonó la notificación de mensaje, Marisela le había respondido.
Se apresuró a quitar el teléfono de su cara para leer, y lo que decía era:
[No me ha platicado mucho sobre ti, creo que si acaso una vez, cuando empezaste a ser mi abogado por primera vez, comentó que ustedes se conocían.]
Después de leer esto, Germán se emocionó muchísimo, hasta se le aguaron los ojos.
Parecía que Celeste realmente era una chica considerada y buena, no lo había traicionado.
Llegó otro mensaje de Marisela:
[Pero tú sí me la nombras bastante seguido, desde que nos conocimos dijiste que la invitara a comer con nosotros, hasta dijiste que sin e