Quiero hablar contigo

Angeles, estuvo deprimida unos dias, no queria salir y comer, casi lo hacía por obligación, estaba desesperado no sabía qué hacer, la última carta que me quedaba para hacerla feliz me la jugué hoy

—¿Crees que esto la animara?

—No lo dudo, ella ama a estas “cosas” es el primer paso para intentar convencerla de ver a un psicólogo, todo lo ocurrido últimamente en su vida, la ha sumido en la más profunda tristeza y yo no puedo verla asi

—Te enamoraste de la g…perdon, de Angeles, no hay duda de eso

—¿Aun lo dudabas? Ella solo vino a poner mi mundo de cabeza y a hechizarme con su forma de ser ¿crees en los destinados y esas cursilerías Bautista?

—No son cursilerías, quizás unas que otras historias sean mitos otras si son verdades, mi hermano y esposa son destinados, yo no creo que pueda encontrar mi alma gemela o estar atado por el hilo rojo, sé que cuando encuentre a la indicada sentare cabeza y la marcare, aunque sea de pura gana por que no soy un alfa

—¿En serio tu hermano encontró a
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